Buscamos impulsar un futuro más limpio mediante el uso de energías renovables y tecnologías avanzadas que promuevan la reducción de emisiones y una mayor eficiencia energética.
Al alternar y combinar el uso del motor de combustión interna con un motor eléctrico se logra una mayor eficiencia en el consumo de combustible. En el caso de los vehículos eléctricos, el consumo de combustible es nulo.
En los vehículos híbridos, el motor de combustión interna no está en funcionamiento constante. Esto se debe a que el sistema híbrido alterna ambos motores, dependiendo de la necesidad del conductor. En el caso de los vehículos eléctricos, estos cuentan solo con el motor eléctrico.
Al utilizar menos combustible, un vehículo eléctrico no emite gases contaminantes, lo que contribuye con la reducción de la huella de carbono y el impacto ambiental.
Hyundai equipa sus híbridos auto-recargables y eléctricos con tecnología de punta, como sistemas de asistencia al conductor, conectividad avanzada, y una experiencia de usuario intuitiva, que hacen que la conducción sea más segura y placentera.
El rendimiento de combustible de un Hyundai híbrido auto-recargable es significativamente mejor que el de un vehículo convencional, ya que combina un motor eléctrico y uno de combustión. Esto reduce el consumo de gasolina, especialmente en condiciones de tráfico urbano. Por ejemplo, según pruebas notariadas, la KONA Híbrida rinde 71.2 km/galón y la TUCSON híbrida rinde 59.9 km/galón.
El costo del mantenimiento de un vehículo híbrido auto-recargable y eléctrico es similar al costo de un vehículo convencional. Es muy importante llevarlo a sus mantenimientos de manera oportuna, y es sencillo, gracias a la cobertura de talleres autorizados de Hyundai a nivel nacional.
La batería de alto voltaje de los híbridos auto-recargables y eléctricos cuentan con un periodo de garantía de 8 años y/o 160,000 km, lo que ocurra primero.
Los Hyundai híbridos auto-recargables funcionan con completa normalidad en condiciones de clima o altura, ya que la reducción de oxígeno no afecta al sistema eléctrico.
Al poseer un motor de combustión interna y un motor eléctrico, los híbridos auto-recargables transfieren la energía cinética del frenado o la desaceleración hacia la batería, lo que permite que se auto-recargue.